Fue el 12 de enero de 1959 cuando Francisco Navas Montesinos, Manuel y Miguel Muñoz Zorrilla, José Luis Barbero de Miguel y José Torres Cárdenas, descendieron el lugar conocido como “La Mina” y se encontraron con la actual sala de la Cascada o el Ballet de la impresionante Cueva de Nerja.
La Cueva de Nerja, llamada “Catedral natural de la Costa del Sol”, se encuentra a 750 metros del litoral sobre un altozano, a unos 200 metros sobre el nivel del mar y en la cara de la Sierra de Almijara. La cavidad abierta al público tiene una superficie de unos 140.000 metros cuadrados, siendo su longitud máxima de 700 metros.
La Cueva de Nerja, llamada “Catedral natural de la Costa del Sol”, se encuentra a 750 metros del litoral sobre un altozano, a unos 200 metros sobre el nivel del mar y en la cara de la Sierra de Almijara. La cavidad abierta al público tiene una superficie de unos 140.000 metros cuadrados, siendo su longitud máxima de 700 metros.
Pero lo más atrayente es la gran columna situada en la Sala del Cataclismo con una altura de 60 metros y un diámetro de 18 metros. Se encuentra a 5 km del casco urbano y a 1 km del anejo de Maro. En la actualidad se realizan obras para la apertura de nuevas galerías.
El acceso a la Cueva se verifica por una escalera hasta llegar a una sala, de 14 metros de ancho y 3 de altura; su suelo presenta un enorme relleno arqueológico. Esta primera sala y la siguiente están unidas por un sinuoso corredor, que desciende hasta desembocar en la segunda sala de relativa amplitud, pues tiene unos 20 metros de largo de 10 de ancho y 5 de altura. Esta altura es la Sala del Belén.